Desde muy pequeño, mi madre siempre me decia que debia de estudiar para "Poder tener dinero" o "Para que no sufras lo que nosotros hemos sufrido" o tambien muy a menudo "Para poder darles algo mejor a tus hijos". En ese entonces, al ser pequeño y no poder reflexionar como lo hago ahora, pues esa era mi meta: Alcanzar las cosas materiales, para poder ser "Feliz". Sin embargo, habia algo en mi que me decia que no era todo correcto lo que me decia en ese entonces mi madre, sentia que el ser "Feliz" no necesariamente se tenia que ser ese camino; que eso solo era una pequeña parte del camino.
Los años pasaban, y siempre era lo mismo y lo mismo. Una vez tras otra mi mama me decia lo mismo. Hasta que una vez, recuerdo que fuimos a comer los dos solos, nos sentamos frente a frente, ordenmos algo de comer, y pues me conto muchas cosas que habian pasado mi padre y ella cuando todavia no naciamos. Yo la escuchaba sin decir nada, solo mirandola mientras me seguia hablando y, al final y casi llorando, me dijo lo mismo que escribi en el parrafo anterior, de tratar de alcanzar esa "Felicidad". Fue en ese momento cuando, deje de mirarla por un momento, y le empeze a decir algo que, por la forma de como me vio ese dia, habia olvidado por completo: ¿Que es la felicidad verdadera? ¿Es alcanzar las cosas materiales? ¿Obtener dinero? "Hay muchas personas, familias, que tienen bastante dinero, pero que no son felices, se pelean, se divorcian..." Mi mamá se quedo sorprendida, ¿Como podia saber todo eso? Pues gracias a Dios, he conocido mucha gente buena, gente mala, pero lo mas curioso es que esas personas eran de diferentes clases sociales, y aprendi mucho con las cosas que sucedian - "Es de inteligentes aprender de nuestros errores, pero es de sabios aprender de los errores de los demas" dicen por ahi- "¿Acaso no te has dado cuenta de eso? Nos habra faltado muchas cosas en la vida, habremos sufrido, pero si volviera a nacer pediria tener la misma vida, porque yo soy una persona que felizmente es estimada por quienes me conocen, y soy asi gracias a las cosas que me han pasado, a las cosas que me enseñaste, inclusive con gritos y castigos". Ambos soltamos una risa. "Asi que no te preocupes por esas cosas, eso solo llega a su momento, y por favor, ya no digas esas cosas sin sentido ¿Si?".
Desde ese dia, mi mamá nunca mas me hablo de eso, de repente este "loco idealista" tenia razon, se habria preguntado. La verdad no lo Se. Pero tener un pensamiento idealista, con frecuencia te hace chocar contra paredes muy duras, y dejenme decirles que realmente duele el golpe, pero si uno realmente cree en sus principios basicos, pues esos golpes doleran, pero con el tiempo sanaran y uno podra seguir adelante con paso firme.
Espero que entiendan que el tener sueños o idearse un mundo mejor, no es tan malo despues de todo, quien sabe, mas adelante, esos sueños...se hagan realidad.